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24 de febrero de 2023La molécula definida bajo el nombre Polysilicol que compone a algunos tipos de silicatos ha demostrado poseer una función específica en la captación de micotoxinas presentes en los alimentos compuestos y granos que tienen como destino la alimentación animal.
Este tipo de minerales están constituidos por partículas cristalinas pequeñas (<2µm) denominadas como minerales de arcilla. Su naturaleza inorgánica está compuesta por Silicio, Aluminio, agua, frecuentemente hierro y materiales alcalinos y alcalino-térreos en pocas cantidades.
Estas estructuras cristalinas que forman dos grandes grupos por su unión formando capas de tetraedros y octaedros varían según el empaquetamiento de sus capas dando lugar a subgrupos y especies según composición química, geometría o superposición de sus capas individuales.
Los minerales que contienen a la molécula polysilicol se consideran altamente plásticos y expansivos con importantes propiedades de “adsorción” que provienen de su alta área superficial, capacidad de hinchamiento y capacidad de intercambio catiónico (CIC). Estos procesos de adsorción son procesos físicos de retención por capilaridad desde el adsorbente hacía el adsorbato, que en nuestro caso corresponde a las toxinas presentes en el alimento.
Sin embargo, la adsorción no solo se limita a la superficie de las partículas, sino que también se extiende al espacio entre capas, por lo que la superficie específica se define como el área de la superficie externa, más el área de la superficie interna de las partículas constituyentes por unidad de masa expresada en m2/g. Este espacio puede aumentar generando mayor cantidad de sitios de unión.
Los procesos de activación aplicados durante el procesamiento de los minerales a nivel industrial buscan optimizar las propiedades fisicoquímicas, de hinchamiento y adsorción ajustándolas a un tipo de uso específico.
La molécula polysilicol presente en los silicatos crea enlaces de hidrógeno entre átomos de oxígeno, con hidrógenos funcionales que poseen su misma estructura química, pero están presentes en las micotoxinas. A través de esta unión las micotoxinas atraviesan el tracto gastrointestinal y son eliminadas con las deyecciones reduciendo el impacto negativo sobre la salud animal. Impacto derivado de la absorción intestinal y distribución orgánica vía sanguínea a diferentes sistemas de órganos que, según la concentración y la especie animal afectada mostrarán diferentes sintomatologías o alteraciones de los parámetros productivos.
Los minerales obtenidos de la región precordillerana en Argentina pertenecen al Mesozoico y muestran excelente calidad para su uso en alimentación animal, debido a la alta capacidad de adherir micotoxinas, incluso 8 veces mayor que otras arcillas, la pureza del mineral extraído y la seguridad química de las mismas respecto de metales pesados dioxinas, furanos y PCBs. Estos últimos son compuestos tóxicos generados por procesos químicos naturales. El depósito de estos contaminantes en el medio ambiente puede trasladarse a los animales y humanos a través del consumo de alimentos contaminados.